7 de Noviembre- Delhi. Estado de Delhi. INDIA

Me levanté prontito pensando ya en el billete de salida de Delhi, no había salido del hostal pero ya tenia claro que no quería quedarme en una ciudad de por si, y Delhi dentro de las ciudades iba a ser la peor de todas. Los comentarios sin parar de la gente hablando del horror de Delhi sin duda no me habían ayudado a crearme una buena imagen. Me levanté y me fui directo a a la estación de trenes, muy cerca del barrio donde dormía, me compré el billete a Jaipur directo y me liberé mentalmente. Volvi para sacar mis cosas del hostal y llevarlas a la estación de Old Delhi, donde salía mi tren, para dejarlas en las taquillas de ahí. El camino en metro he de decir que fue increíble. Me quedé maravillado del sistema de Metro de Delhi, super moderno y super limpio, parece sacado de Bilbao y de repente incrustado en Delhi. Funciona bien, va rápido y la gente es super civilizada dentro….o eso parecía.  Dejé mis cosas y fui directo al Fuerte Rojo, que está al lado de la estación, pero por ser Lunes estaba cerrado, vaya faena, me empecé a preocupar que todo estuviera cerrado por ser Lunes, pero aun asi tenia que ir a descubrirlo yo solo. Caminé un rato por Old Delhi para comprobar de verdad lo que significa la palabra SUPERPOBLACION, increíble la cantidad de gente que se mueve en esa  parte de la ciudad, no cabe un alfiler, la gente se apelotona en los lados de carretera, miles de coches, rickshaws y  distintos vehículos,  miles de personas en todos lados…increíble. No sé que me pasaba en ese momento, que no me afectó en lo mas minimo, es como si me hubiera ya preparado para ello y el entrenamiento del resto de ciudades me hubiera valido, caminaba sin mas, siguiendo el paso de la ciudad, y dejándome llevar por el movimiento de la gente. Me volvi al metro y segui hacia la zona de La India Gate. Parecia que el único metro cercano era el de Central SEcretariat  asi que me dirigí hacia ahí. Salgo y de repente estoy en medio del barrio gubernamental de Delhi, calles anchas, bien cuidadas y asfaltadas, kilómetros de césped a ambos lados de la carretera, super bien cuidado, ni un solo ruido, completamente perfecto…pero completamente irreal. Me quedé patidifuso al ver el nivel de los barrios donde viven el presidente y el primer ministro, y a no mas de 4 paradas en metro, Old Delhi, donde la gente no puede ni caminar sin chocarse, viven en la calle y duermen en las basuras, pero aquí no, aqui sobraba espacio para miles de personas, pero no había ni una. Era como montarse en el metro que lleva al mundo al revés. De lejos se veía la India Gate, un paseo parecido a los campos elíseos, pero sin coches, y con mucho verde a los lados, y con un Arco enorme al fondo, muy parecido en general.  Despues de darme una vuelta por el barrio gubernamental,preguntándole a todos los policías que era cada edificio, fui hasta el India Gate. Un par de fotitos, nada demasiado especial de este monumento dedicado a los militares fallecidos en las distintas guerras de India, y directo a la tumba de Humayun.  Una especie de mini Taj Mahal se erigía en las semi afueras de la ciudad, una mausoleo creado para Humayun por su esposa. El sitio en si me encantó y el poco ruido y ajetreo de turistas hizo la visita super agradable, al salir conocí a un holandés que viajaba solo, pero viajaba de forma un poco lujosa. Le habían contratado todo el paquete de todo y tenia un conductor esperándole en la puerta, me apresuré a pedirle que me llevara por favor, y me dejaron en la zona centro, para que fuera caminando hasta la zona de Connaught Place.

Al llegar a connaught Place se iluminaba ante mis ojos un Subway,  imposible! Después de tantos días perdido por India comiendo cosas bastante picantes y parecidas entre si, necesitaba un poco de variedad, echaba de menos un bocadillo con algo de carne, ya que tampoco la había probado desde que llegué, y sin pensármelo dos veces entré y me pedi un super bocadillazo del Subway! Nunca pensé que lo echaría de menos… pero tengo que admitir que así fue.

Connaught Place es básicamente una rotonda con miles de tiendas caras, que la mayoría de la población de India no puede permitirse, y que es buen escenario para comprobar las diferencias sociales de este país, gente pidiendo en la calle, el hombre poderoso saliendo de la tienda de trajes, las niñas de papa andando mientras airean su móvil y su bolso, delante de una niña que esta pidiendo en la calle. Un poco chocante, pero tampoco tanto, ya que había gente que se dedicaba a “limpiar” un poco la zona.

Me volvi a la estación y esperé el tren, en el anden conoci a Alisa, una suiza que iba a Pushkar, una ciudad a la que iba a ir después de Jaipur. Me comento que a ella no le había gustado Jaipur, me explico un poco como era, y sin duda estaba en la línea de todo lo que me habían dicho antes el resto de gente… y después de Delhi  y el ajetreo anterior, la verdad que me apetecia un poco de India rural, un poco mas de tranquilidad, me empezaba a convencer la idea de irme a Pushkar, donde además había la feria del Camello, la feria mas importante del Rajastán, el estado del desierto de India, y donde me estaba adentrando en mi camino hacia el sur.

Entramos en el tren tras mucho empujarnos con mucha gente,es increíble la poca paciencia que tienen los indios en el tren, se empujan, gritan, no dejan salir a la gente antes de entrar… es increíble. Alisa y yo estábamos en la misma sección, donde conocimos a otros dos italianos que también iban a Pushkar… poco a poco me convencía mas la idea de irme hacia ahí… después de todo no quería ir a una ciudad fea y superpoblada como era Jaipur.

En el ultimo minuto, en la propia parada de Jaipur, a las 4 de la mañana, decidí, me voy a Pushkar, me salto Jaipur.

De aquí iré a Jaisalmer, Jodhpur, Udaipur y luego ya conectaré con Bombay para bajar al sur de India.  El viaje continua, muchísimos perdones por no actualizar antes, pero espero que podais entender la situación complicada.